Esta mañana han sonado las campanas de nuestra parroquia. Y lo han hecho para convocarnos a la oración, para recordarnos que estamos de guardia.
Pero también han sonado para llamarnos a la esperanza. Porque no estamos solos. La Iglesia nos acompaña. Dios no nos ha dejado de su mano. ¡Todo va a salir bien!
Y reflejo de esta esperanza, de este optimismo, son los dibujos de los niños y niñas de nuestra parroquia que estamos recibiendo, y que subiremos pronto al blog.
¿Ya has hecho el tuyo?
¡¡Aún estás a tiempo!!