lunes, 26 de agosto de 2019
EL SEÑOR ESTÁ... ¡CON VENEZUELA!
Y así lo hemos demostrado desde las comunidades parroquiales de O Grove (San Martiño y San Vicente), en un fin de semana de oración y ayuda.
Porque la oración es muy importante. Como la vivida anoche San Vicente do Mar. En un rato ante el Santísimo. El mismo Dios que se ha quedado en forma de pan.
Y... ¿Para qué? Para ayudar a los Padres Joel, Pedro, Josué y Raúl. Para ayudar a su país. Para ayudar a sus Diócesis. Para enseñarnos que todos somos miembros del mismo Cuerpo: la Iglesia. Para que sepamos que cuando ayudamos a quien sufre, ayudamos al mismo Cristo. Y para que, entre todos, construyamos el Reino de Dios aquí en la Tierra. En Galicia, o en Venezuela, o en cualquier lugar del mundo.
Porque adoramos al mismo Dios. Porque Jesús vino a ayudarnos a todos. Porque cuando dos o más nos reunimos en nombre de Jesús, Él está entre nosotros. Porque la presencia de los sacerdotes venezolanos nos enriquece, y porque agradecemos —y mucho— su ayuda.
Y, sobre todo, porque cuando damos de comer y de beber, visitamos y compartimos, estamos predicando el Evangelio. Estamos ayudando a nuestra salvación y la del mundo. Estamos entrando por la puerta estrecha. Estamos practicando ese mismo Amor que llevó a Jesús a la Cruz por nosotros.
Que el Señor ayude al pueblo de Venezuela. Que el Señor nos siga bendiciendo. Que el Señor nos anime a dar esa respuesta que se espera de nosotros. Amén.